Diez chilenos y un argentino fueron detenidos acusados de sustraer 16 pick-ups en un mes. Sospechan que la organización cometió varios robos similares en Chile durante 2022.
La Justicia procesó a 11 sospechosos de integrar una asociación ilícita; para identificarlos, detectives de la Policía de la Ciudad analizaron imágenes captadas por 2200 cámaras; creen que los vehículos eran llevados a Paraguay con las patentes cambiadas.
Los delincuentes marcaban la camioneta. Y actuaban cuando estaban estacionadas. En muchos casos, inutilizaban el sonido de la alarma mediante el corte del cable correspondiente desde la parte externa del vehículo. Después, ingresaban violentando alguna de las ventanillas traseras o una cerradura.
Una vez en el interior de la camioneta, y portando una llave genérica con una nueva frecuencia asignada, uno de ellos manipulaban la computadora de a bordo llamada On Board Diagnostinc (O.B.D) y le asignaban la frecuencia de arranque correspondiente a dicha llave.
En los robos participaba de apoyo una camioneta Hyundai Tucson blanca, con vidrios polarizados y dominio radicado en Chile. Con ese vehículo había ingresado a la Argentina el cabecilla de la banda, quien tenía antecedente de robo en San Isidro. Lo hizo con otras dos personas, de su misma nacionalidad.
En las filmaciones se pudo establecer que un Chevrolet Prisma Joy, también blanco, acompañaba a los vehículos robados hasta fuera de jurisdicción de la Ciudad. La patente que llevaba pertenecía a una empresa de alquiler de vehículos sin chofer, con domicilios en la Ciudad y en la provincia de Corrientes.
