Argentina

La decisión de Aerolíneas Argentinas en el caso de la azafata acusada por la amenaza de bomba

Aerolíneas Argentinas confirmó que se presentó como querellante en la causa por la amenaza de bomba a un avión de esa compañía y suspendió sin goce de sueldo a Daniela Carbone, la azafata acusada de haber hecho el llamado que demoró el despegue de un vuelo a Miami el pasado 21 de mayo. En tanto, la Justicia rechazó la excarcelación de Carbone, al entender que puede entorpecer la investigación.

La mujer, que se encuentra imputada por coacción, intimidación pública y la interrupción de servicios públicos, seguirá detenida y al resguardo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

Así lo resolvió este miércoles el juez federal Federico Villena, quien dispuso que el jefe de la Unidad Operacional de Seguridad de Ezeiza la notifique de la situación.

De todas maneras, el magistrado dejó abierta la posibilidad de que la defensa solicite la prisión domiciliaria.

Antes de que se conociera el rechazo al pedido de excarcelación que presentó la defensa, el fiscal federal de Lomas de Zamora Sergio Mola pidió realizar un informe socio ambiental de la vivienda de la azafata para ver si, eventualmente, es viable concederle el arresto domiciliario.

Riesgo de entorpecer la causa
La decisión se tomó luego de que se descubriera que la azafata intentó de manera remota acceder al Iphone desde el que salió la amenaza para presuntamente “borrar todo su contenido”.

Según la investigación, a las 19.15 del 24 de mayo Carbone le mandó un audio a su hija en el que le contó que se comunicó con Apple Support para restablecer su cuenta.

Fuentes cercanas al caso informaron que en la causa hay capturas de pantallas en donde intercambiaban códigos de seguridad. De casi 17 mil imágenes que se analizan, se encontró un video con instrucciones para “recuperar mensajes de Whatsapp” y conversaciones con el soporte de Apple.

Para el juez, “se verifica la posibilidad de que la justiciable pueda entorpecer la investigación, ya sea mediante la destrucción, modificación, supresión, falsificación u ocultación de elementos de prueba».

También se analiza la posibilidad de que intente «amenazar a los testigos» o influir «para que testigos o peritos informen falsamente o se comporten de manera desleal o reticente», así como de inducir o determinar «a otros a realizar tales comportamientos, aunque no los realizare”.

En su valoración, el masgistrado ponderó los graves perjuicios provocados a los pasajeros que debían partir esa mañana rumbo a Miami y las consecuencias económicas para la empresa y la Policía de Seguridad Aeroportuaria.

Aerolíneas Argentinas se presentó como querellante
Este miércoles, Aerolíneas Argentinas confirmó que ya se presentó como querellante en la causa en la que se investiga a Carbone.

“Estamos esperando ser aceptados como querellantes. Carbone fue suspendida preventivamente. Una vez que podamos obtener de manera directa los elementos del caso, va a ser despedida con justa causa”, señalaron fuentes de la aerolínea de bandera.

La empresa sufrió una pérdida superior al millón de dólares entre el operativo de evacuación de los pasajeros y la reprogramación de la partida del vuelo hacia Miami.

La investigación
Los hechos que se investigan ocurrieron el domingo 21 de mayo a las 7.35, cuando el vuelo AR1304 de Aerolíneas Argentinas debió ser evacuado en su totalidad antes de partir rumbo a la ciudad estadounidense de Miami, con 270 pasajeros y 12 tripulantes, a partir de una llamada de amenaza de bomba que recibieron el comandante del vuelo y personal de tierra de la compañía.

Luego de un operativo de seguridad, se corroboró que se trataba de una falsa amenaza y el avión pudo despegar. Lo hizo a las 16.50, más de nueve horas después de lo previsto.

Según informaron fuentes vinculadas con la investigación, la amenaza consistió en un audio que decía: «Decile al capitancito que le pusimos tres bombas en el Miami. Que se deje de joder con la política y chequee el avión porque van a volar en mil pedazos».

La voz fue distorsionada, pero los investigadores pudieron establecer primero que se trataba de una mujer y, luego, identificar el origen de la comunicación, lo que llevó a la detención de la azafata.

Actualmente, la justicia investiga si la mujer habría mantenido, hasta hace dos meses, una relación sentimental con un tripulante de cabina que se encontraba en el vuelo que debía despegar hacia Miami. Una hipótesis es que habría utilizado la amenaza al comandante y al avión para despistar sobre el verdadero motivo de su accionar, molestar a su expareja.

Javier Furlotti

Administrador VM Multimedia

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba