Liberaron a los dos sospechosos por la brutal golpiza al policía
Trascendió que la evidencia recabada hasta el momento no alcanza para acusarlos. Diego Gatica sigue en estado crítico.
La investigación por la brutal agresión al oficial ayudante Diego Gatica tuvo un revés. Este jueves a última hora, la fiscal de Instrucción 4, María del Valle Durán, ordenó liberar a los dos sospechosos detenidos: Víctor Alejandro “El Pelado” Alaniz y Rodrigo Maycol “El Manco” Velázquez. De una fuente trascendió que la evidencia recabada hasta el momento no alcanza para acusarlos; eso sumado al resultado de nuevos análisis en cámaras de seguridad de la zona.
Estaba prevista la audiencia de formulación de cargos contra “El Pelado” Alaniz y “El Manco” Velázquez, señalados por participar del ataque que Gatica sufrió el lunes, cerca de las 19:30, en la avenida Eva Perón, a la altura del barrio Tibiletti. Habían sido detenidos en la madrugada del miércoles durante nueve allanamientos que la Policía realizó en los barrios Virgen de Luján, Tibiletti, República, en calle Chacho Peñaloza y en la avenida Juan Gilberto Funes de la capital.
Por la tarde, Durán dijo que ese trámite no iba a realizarse. “Luego de reunirme con el Departamento de Investigaciones y de recepcionar hoy (por este jueves) cinco declaraciones, se ha tomado la decisión de suspender las audiencias de formulación de cargos a fin de ampliar previamente la investigación y esperar el resultado de pericias que se están llevando a cabo en este momento”, explicó. Pasadas las 22, la fiscal le confirmó a este medio que el motivo de la libertad era el mismo.
Una fuente policial de la investigación había anticipado que “luego de valorar los indicios contra Alaniz y Velázquez, la fiscal consideró oportuno no imputarlos por el delito investigado. Mientras, se continúan reuniendo evidencias para dar con la totalidad de los participantes en el hecho”.
El resultado de los allanamientos de anteayer fue el secuestro de 38 celulares y prendas de vestir que, según trascendió, no coincidirían con las que llevaban puestas los atacantes. Ninguna fuente lo confirmó.
Para los familiares y amigos del policía, la de ayer volvió a ser otra jornada de esperanza. A las 19, camaradas y miembros de la Plana Mayor participaron junto a ellos de una misa en la parroquia María Auxiliadora del barrio Eva Perón; un día antes, efectivos de diferentes delegaciones de la Policía de San Luis y parientes realizaron una caravana hasta la Virgen de la Cobrera, donde oraron y rogaron para que mejore.
Al cierre de esta edición, el agente permanecía en el mismo estado en el que ingresó al Hospital Central “Ramón Carrillo”: grave. Al mediodía, un parte de prensa del hospital detalló que continuaba en la Unidad de Cuidados Críticos con asistencia respiratoria mecánica, hemodinámicamente estable y sin cambios neurológicos.
Fuente: El diario de la Republica