La zona noroeste de Villa de Merlo fue de las más afectadas. El Municipio realiza relevamiento de daños. Vecinos se solidarizan y juntan materiales para distribuir entre las personas damnificadas.
Los destrozos que ocasionó el temporal en Villa de Merlo son incalculables. El Municipio relevó hasta el momento 80 familias que sufrieron cuantiosos daños en sus viviendas.
El secretario de Desarrollo Humano, Federico Robles, explicó que la zona más afectada es la parte noroeste de la localidad. Vecinos y vecinas de los barrios de Piedra Blanca Arriba y Abajo, Campos del Hinojo y aledaños, son quienes más asistencia requieren.
La intensa pedrada rompió las chapas, tejas y machimbres de los techos, vidrios de puertas y ventanas. El aguacero se encargó del resto. Por los orificios se filtró la lluvia que no cesó por horas e inundó el interior de los hogares. Muebles, electrodomésticos, ropa, recuerdos, se perdieron por efecto del agua.
El Comité de Crisis -conformado por diversos actores de la sociedad merlina- hizo una evaluación preliminar de daños y solicitó la colaboración de Provincia para dar una respuesta inmediata y paliativa a quienes más complicados se encuentran, ya que el pronóstico indica que continuarán las tormentas al menos hasta el jueves.
«Resulta imprescindible disponer de recursos que permitan acompañar a las familias más afectadas, grupos familiares donde los aspectos habitacionales presentan mayor precariedad, encontrándose al momento en situación de mayor vulnerabilidad», resaltó el CC en la solicitud formal realizada al Ministerio de Desarrollo Humano de San Luis, y en la que se pidió el envío de colchones, frazadas, chapas de zinc, tanques de agua, productos alimenticios y de higiene, bidones de agua y silo bolsas.
Ayer por la noche -domingo- Mónica Becerra, a cargo de esa cartera provincial, llegó a la villa con algunos de los elementos peticionados.
Robles dijo que para gestionar asistencia, las personas deben comunicarse con la secretaría de Desarrollo Humano o dirigirse al CIC. También, comunicó que en el cuartel de bomberos se reciben donaciones de bidones de agua, ya que toda esa zona se encuentra sin agua por el corte que aun persiste y son al menos 35 familias las que perdieron sus tanques a causa del granizo.
Vecinos solidarios
La contingencia también saca a relucir el costado más solidario de la comunidad. Muchos vecinos se pusieron al frente de campañas para ayudar a las personas más afectadas.
La situación económica está cada vez más difícil y la mayor parte de los damnificados no cuenta con los recursos como para poder afrontar los gastos que demanda reparar los daños producidos.
«Vi que hay mucha gente necesitando materiales», dijo Leonardo La Frossia, administrador de una página de clasificados, al referirse a la iniciativa que impulsa para juntar chapas, maderas, lonas, nylon y silobolsas y así poder repartirlas entre quienes se comunicaron con él o utilizaron las redes para compartir su situación.
Fuete: El Corredor Noticias
