Una tragedia sacudió a la ciudad de Río Verde, en Mato Grosso, Brasil, cuando un niño de dos años tomó una pistola 9 mm que su padre dejó sobre una mesa en el patio trasero y disparó accidentalmente contra su madre, Déborah Rodrigues Monteiro, de 27 años. El hecho ocurrió la noche del viernes 13 de junio, pero se viralizó este miércoles tras la difusión de un video captado por una cámara de seguridad.
Las imágenes, que han conmocionado a Brasil, muestran a Déborah intentando dar unos pasos tras recibir el disparo antes de colapsar. Su pareja corrió desesperada a buscar ayuda, pero, pese a ser trasladada de urgencia a un hospital, la joven no sobrevivió. La Policía Militar de Goiás confirmó que el arma, legalmente registrada, fue incautada junto con un cargador y 18 municiones para su análisis.
La investigación se centra en determinar por qué el padre dejó el arma cargada al alcance del niño, una negligencia que podría derivar en cargos penales por homicidio culposo. El caso ha reavivado el debate en redes sociales sobre la responsabilidad en la tenencia de armas en hogares con menores, con miles de usuarios exigiendo mayores controles.
La familia, devastada, enfrenta un dolor indescriptible por una tragedia que, según las autoridades, pudo evitarse con medidas básicas de seguridad. La Policía continúa recopilando testimonios y pruebas para esclarecer los detalles del suceso.
