Video: Batalla campal en la final de la Liga del Norte Sanluiseño: tres heridos y un partido suspendido

Un violento episodio empañó lo que debía ser la fiesta del fútbol regional. La final de la Liga del Norte Sanluiseño entre Mitre de Luján y Estrella Roja de Candelaria terminó en escándalo: el encuentro fue suspendido luego de una batalla campal que se desató en pleno campo de juego.
El partido se disputaba en Candelaria, con un clima cargado de expectativa, ya que en el primer cruce Mitre había caído 2 a 0 y buscaba revertir la serie. Cuando el marcador estaba 1 a 0 y todo se encaminaba a una definición ajustada, un cruce verbal entre dos jugadores desencadenó la gresca. Lo que comenzó con insultos se transformó en golpes de puño, empujones y botellazos que involucraron rápidamente a titulares, suplentes e integrantes de los cuerpos técnicos.
La situación se desbordó por completo cuando familiares y allegados invadieron la cancha, multiplicando la violencia. Incluso se observaron mujeres y menores en medio de la pelea, lo que generó escenas de extrema tensión. Según los primeros reportes, al menos tres personas debieron ser atendidas por una ambulancia que se encontraba en el lugar.
Falta de seguridad y un problema repetido
Uno de los puntos más cuestionados tras el escándalo fue la ausencia de efectivos policiales en el operativo de seguridad. Como ocurre en otras ligas de la provincia, los organizadores habían contratado personal de seguridad privada, que carece de poder para intervenir ante hechos de violencia de esta magnitud. Esto dejó a los jugadores y al público en una situación de desprotección absoluta.
Este no es un hecho aislado: en la Liga del Norte ya se habían registrado enfrentamientos similares en temporadas anteriores, algunos de los cuales terminaron con denuncias policiales y sanciones deportivas mínimas. “No es la primera vez que pasa”, reconocieron testigos, recordando que hace menos de un año otra final también terminó en piñas.
Expectativa por las sanciones
El partido quedó oficialmente suspendido y ahora se espera una resolución de las autoridades de la Liga del Norte Puntano y de la Federación Sanluiseña de Fútbol, de la cual depende esta competencia regional. Dirigentes y entrenadores reclaman una sanción ejemplificadora para los responsables directos de la gresca, como una forma de desalentar futuros episodios de violencia.
En paralelo, desde distintos sectores deportivos y sociales se insiste en la necesidad de que los partidos vuelvan a contar con presencia policial obligatoria. “La seguridad privada no alcanza para controlar semejantes situaciones”, señalaron dirigentes consultados.
La violencia en el fútbol local vuelve a quedar en el centro de la escena, dejando en segundo plano lo deportivo y generando preocupación sobre el mensaje que reciben los jóvenes que asisten a las canchas.